La carne natural, un alimento en constante lucha contra su peor enemigo.

En este post hablaremos de la lucha que mantienen la carne natural y la industrial. ¿Por qué la gente sigue consumiendo carne industrial, a pesar de lo perjudicial que esta es para la salud? Os Mostraremos por qué se debería reducir el consumo de la carne ultraprocesada  y os enseñaremos como distinguir la carne natural, de la procesada y ultraprocesada. ¿LISTO?

La carne natural es un alimento que nos ofrece increíbles ventajas para nuestra salud, como ya comentamos en uno de nuestros anteriores post (BENEFICIOS DE LA CARNE VACUNA EN LA SALUD), aun así, cientos de millones de personas en el planeta, consumen más cantidad de carne industrial que de natural. ¿Por qué?

Se puede llegar a pensar que una de las respuestas quizá sea comodidad, o que es un alimento de un valor más económico… Todo esto puede ser cierto, la carne industrial nos ofrece comodidad y poco esfuerzo económico, pero también nos ofrece numerosas enfermedades de las cuales la gente no es consciente y que a la larga, todo lo que te has ahorrado en estos productos, lo acabas pagando caro.

Adquiriendo todos estos productos de poca calidad, abrimos la puerta de nuestra salud a inquilinos como la diabetes, anemia, sobrepeso… y muchas más que producen una falta considerable de vitaminas en nuestro organismo, lo que puede derivar en problemas de corazón producidos por infartos.

Todo esto que acabamos de comentar no solo lo produce la carne industrial, si no todos aquellos alimentos ultraprocesados que se comercializan por numerosos establecimientos día a día. Estos productos pasan unos controles de calidad y sanidad mínimos, lo justo para que puedan salir al mercado, y algunos salen incluso sin pasarlos.

Desde Inoso Mendizabal te planteamos la siguiente reflexión: “¿Pondrías en riesgo  tu salud por ahorrar unos pocos euros, realmente te merece la pena”?

A continuación os enseñaremos como podéis distinguir la carne natural, de la procesada y ultraprocesada.

CARNE NATURAL

Es aquella carne la cual cuál no se le ha añadido ningún componente, es decir, no se le ha introducido industrialmente sal, grasas u otros componentes, por lo tanto no han recibido un tratamiento industrial.

La podemos identificar porque es un producto perecedero de corta duración, es decir, tiene una escasa vida útil, y dentro de un rápido periodo de tiempo empieza a alterarse.

Este alimento es el más adecuado para nuestro organismo, está mínimamente procesado, es decir, no se le han añadido ingredientes extras, pero si un leve procesamiento que no altera sus componentes naturales, por ejemplo: la limpieza, congelación o envasamiento.

CARNE PROCESADA:

Es aquella carne que recibe un proceso pequeño, pero la recibe. Cambia algo su naturaleza, ya que le añaden materia grasa, sal u otros aditivos, aunque sea en pocas cantidades.

La podemos distinguir porque es un alimento que se identifica como una versión diferente a la de su alimento natural, con lo que se consigue que su calidad disminuya generando un desequilibrio en sus nutrientes.  Puede usarse como alimento de elaboraciones más complejas.

CARNE ULTRPROCESADA:

Es aquella carne que recibe un proceso industrial muy extenso y altamente perjudicial para nosotros. Se le ha añadido materia grasa, sal, y otros aditivos en grandes cantidades.

La podemos distinguir ya que es un producto altamente duradero debido a todos estos componentes extras que se les añade. Esta lista para consumir en el mismo momento, sin apenas necesidad de elaborarla para su posterior consumo. Escasea de vitaminas y abunda en riesgos para nuestra nutrición.

Visita nuestro anterior post, si deseas saber cómo influye la genética en la carne vacuna.